Johnny
Winter
Johnny
Winter
Blues-rock, 1969
Johnny Winter estaba destinado a vivir sobre un escenario. Desde
muy pequeño, animado por los gustos musicales de sus padres y en eterna
colaboración (o competición) con su hermano Edgar, el mítico guitarrista albino
empezó a conocer los sonidos y los ritmos de todo tipo de estilos musicales y a
guerrear con las cuerdas de la guitarra y el ukelele. De este modo, su debut,
tanto en directo como en estudio, fue bastante precoz, versionando a The Everly
Brothers junto a su hermano a los 10 años en una función escolar y grabando un
single con su banda adolescente Johnny and the Jammers a los 15.
En esos años, el blues se cruzó en su vida y, con una
formación musical más que avanzada, pronto apadrinó el viejo estilo negro como
propio. Después de algunas giras por el gigantesco estado de Texas, Winter por
fin decidió meterse en un estudio para grabar “The progressive blues experiment”.
A pesar de la limitada difusión del disco, editado por un sello local, este debut
discográfico sí consiguió abrirle algunas puertas y nuevos escenarios en los
que mostrar su casi virtuosa forma de tocar la guitarra y su concepción de un
blues más potente y rocoso, aunque sin perder un pizca de autenticidad.
Con ese reconocimiento ganado y un contrato por una discográfica
más importante en el bolsillo, el guitarrista publicó “Johnny Winter”, un disco
que ahondaba en los mismos preceptos que su debut, con interpretaciones ortodoxas
aunque desbocadas de clásicos del blues y algunas composiciones propias que
asumían con respeto y cierta curiosidad juvenil las claves del sonido de viejos
bluesmen como B. B. King o Muddy Waters.
El disco se abre con “I’m yours and I’m hers”, una mezcla de
blues clásico con sonidos más rockeros y con la brillante técnica y el sucio
fraseo de Winter, tanto en los riffs como en sus solos de slide, una estrategia
que se repite en “Leland Mississippi blues”, otra pieza que resume a la
perfección el estilo del guitarrista texano. Igualmente, “Be careful with a fool”
y “Back door friend”, sendas versiones de viejos clásicos desempolvados por
Winter, muestran igualmente esa mezcla entre la ortodoxia y las ganas de
modernidad, esta vez con un ritmo más lento.
Sin embargo, este disco también sirve para que Winter y su
banda demuestren la variedad de sonidos que son capaces de desarrollar. Así, en
“Dallas” y “When you got a good friend”,
el tema a tratar es el blues más pantanoso y primigenio y sus conexiones
con el country y el folk, mientras que la magnífica versión de “I’ll drown in my own tears”, el grupo aborda sonidos más cercanos al soul. En el campo del
blues más puro, “Mean mistreater” es una balada que cuenta con la participación
de dos viejso ídolos de Winter, el bajista Willie Dixon y el armonicista Walter
“Shakey” Horton, mientras que “Good morning little schoolgirl” permite a los músicos
explorar los caminos del rhythm’n blues y el rock’n roll, con una sección de
vientos incluida.